Flor de sacuanjoche
domingo, 21 de noviembre de 2010
Para mi querida Luna.- Por Melba
De niña, te miraba suspirando,
mi querida y enigmática Luna.
Pensaba en lunáticos que me espiaban
y adivinaban mis pensamientos.
De joven, tus rayos de luna llena
me cubrían amorosamente con tu luz dorada
mientras yo, caminando por los campos,
te adoraba sin cesar de contemplarte.
En julio de milnovecientos sesentinueve
holló el hombre tu superficie sagrada,
sin selenitas y sin misterios
pretendiendo despojarte de tu encanto...
Y ahora, la teoría del gran impacto
te señala en tu origen
como parte de la Tierra...
Pero no me importa
te sigo queriendo
te sigo suspirando
tu dulce fuerza mueve
remueve y conmueve
las mareas de mi cuerpo...
Entre más sé de vos más te quiero.
.
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6 comentarios:
Muy buen poema. De pronto recordé aquella estrofa de la canción de Nacha Guevara:
"Cuando me canse de la lluvia
y de la sangre y de la guerra
Cuando me canse de esta tierra
me mudaré a la luna rubia"
Que tengás una feliz semana.
Querida amiga.
Que bello Poema a esta estrella redonda y bella.
Gracias.
Un abrazo, Montserrat
Qué tendrá la luna que a todos nos atrae tantoooo. Cuando la miro, brillante en el cielo, me acuerdo de muchas personas queridas y entre ellas estáis vos.
Un abrazo grande
Conchi
(Por aquí estamos bien. Espero que por vuestra casa, también.)
Precioso poema Melba. Por unos momentos me has hecho trasladarme a mi niñez.
Un saludo
BELLISIMO BELLISIMO!
UN ABRAZO ENORME!
LIDIA-LA ESCRIBA
Precioso poema querida Melbita.
Te felicito.
Ah! Esa Luna, a cuántos poetas habrá inspirado y de cuántos amantes habrá sido cómplice?
Abrazos y besos desde esta Hvidovre hoy cubierta por un enorme manto de nieve.
Ian.
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