Yo estaba empezando mi exilio en España, y pensé: si bastan las aguas de un río para borrar la memoria. ¿qué pasará conmigo, resto de naufragio, que atravesé todo un mar? Pero yo había estado recorriendo los pueblecitos de Pontevedra y Orense, y había descubierto tabernas y cafés que se llamaban Uruguay o Venezuela o Mi Buenos Aires Querido y cantinas que ofrecían parrilladas o arepas, y por todas partes había banderines de Peñarol y Nacional y Boca Juniors, y todo eso era de los gallegos que habían regresado de América y sentían, ahora, la nostalgia al revés. Ellos se habían marchado de sus aldeas, exiliados como yo, aunque los hubiera corrido la economía y no la policía, y al cabo de muchos años estaban de vuelta en su tierra de origen, y nunca habían olvidado nada.
Y ahora tenían dos memorias y tenían dos patrias.
Fragmento de la obra "El libro de los abrazos" del uruguayo Eduardo Galeano
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6 comentarios:
Voy muchas veces a Galicia, pero aun no conozco el rio del Olvido...o sera que no me acuerdo???
Saludos!
Yo me he bañado en las aguas de "o rio do esquecemento" tratando de olvidar, pero no funciona, eso si sales limpio, fresco y muy relajado.
no me olvido de madarte muchos besos
que bueno es "ser" y "saber ser" "universal" un beso indita
Qué bonito es este fragmento. Cuando las cosas calan, cuando las vivencias son fuertes no se olvidan nunca y se pueden tener no varias patrias sino un solo mundo.
Un abrazo, amiga.
Conchi
Habría que recordar aquella canción pooema de Facundo Cabral: No soy de aquí, ni soy de allá, no tengo edad, ni porvenir y ser feliz es mi color de identidad.
Hola! tiene que ser precioso el lugar no le conozco pero ya me gustaría! Seguimos en contacto! un abrazoo grandee!
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